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¡Hola, Manitas! Por fin parece que se marcha el calor y llegan las esperadas temperaturas de otoño, pero mucho ojo, porque vendrán acompañadas de las temidas temperaturas de invierno y, si no queremos llevarnos una sorpresa con el consumo de la calefacción, debemos andarnos con cuidado. Por eso hoy os traigo unos consejos muy sencillos para que podáis ahorrar en el consumo de vuestra calefacción

Veamos unas cuantas cosas que podemos hacer sin mucho esfuerzo.

Mantenimiento de radiadores

Es fundamental tener nuestros radiadores bien purgados, es decir, que nos hayamos ocupado de sacar el aire que puede acumularse en el interior después de estar todo el verano sin usarse.

Si en el circuito de nuestro radiador circula aire, se consume más energía para obtener exactamente el mismo calor, por lo que mi primera recomendación es que, en estos días intermedios, aproveches para hacer la purga de todos los radiadores de casa.

Usar el termostato

En primer lugar debemos comprobar que funcione correctamente, pero además, es recomendable que, si no vamos a estar en casa durante varias horas al cabo del día, nos sirvamos del uso de un programador que lo regule.

Asegurar cierres de puertas y ventanas

La mayor parte del calor de una casa se pierde por puertas y ventanas mal acabadas o que, con el paso del tiempo, se han desajustado. Debemos siempre comprobar que no hay entradas de aire, y en caso de encontrarlas sería conveniente ajustar las ventanas e incluso poner burletes aislantes. Los escapes de calor a través de puertas y ventanas pueden suponer un aumento del 20% en el coste de la calefacción.

Usar láminas reflectoras y cortinas

Utilizar láminas reflectoras para los radiadores, evita la pérdida de calor hacia las paredes, de forma que rentabilizamos mucho más la energía que sale de los mismos, pero también, el uso de cortinas funciona como aislante del frío de los cristales de las ventanas.

Contadores individuales de calderas comunitarias

En comunidades con calefacción central, es muy interesante la instalación de repartidores de consumos de calefacción, así cada vivienda paga por lo que consume, y el ahorro puede ser de hasta el 30%.

Válvulas en cada estancia

Por la misma razón también es recomendable instalar válvulas termostaticas en radiadores, para ajustar la temperatura por habitación, así, además de no necesitar tanta energía podemos mantener diferentes temperaturas según las necesidades de cada estancia.

Regular correctamente la temperatura

Por último es fundamental ajustar la temperatura a lo necesario, que salvo situaciones concretas es 20-21 ºC. Por cada grado de aumento de temperatura el consumo energético aumenta en un 7%, y está demostrado que en esos márgenes de calor el cuerpo humano puede estar perfectamente atemperado sin pasar frío.

En fin, manitas, esto ha sido todo por hoy. Espero que os hayan sido útiles mis consejos y que no olvidéis que somos expertos en climatización y podemos ayudaros con cualquier situación que queráis mejorar a este respecto. Podéis compartir este contenido con todos vuestros contactos y seguirme a través de mi página de Facebook o contactarme en el formulario de esta web.

¡Buena llegada del frío!

Hasta pronto.

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