¡Buenas, manitas!
Quizá algunos de vosotros hayáis tenido a menudo un problema bastante habitual: el atasco de tuberías. Hoy en nuestro blog, he pensado que os puede ser de gran utilidad conocer algunos trucos básicos para poder desatascarlas vosotros mismos, y así liberarnos de los problemas que esto puede ocasionar, como malos olores y averías más graves o fluidos indeseados.
El más básico: un alambre metálico
Si el atasco es leve, este truco es el más sencillo. Únicamente necesitareis un alambre y vuestra propia habilidad para libraros del atasco de tuberías.
Se requiere un alambre que pueda moldearse y que tenga una longitud suficiente, pueden seros muy útiles los alambres de que están hechas algunas perchas. Le damos forma de gancho y vamos empujando y vaciando, a través del desagüe, para limpiar poco a poco la cañería atascada, vaciándola de cabellos, restos de comida y suciedad. Posteriormente, deja que corra algo de agua caliente con presión.
Sal disuelta en agua hirviendo
Este es un truco muy fácil y lo usaremos si el atasco no es muy grave. Tenéis que hervir 1 litro de agua con un puñado de sal generoso. Cuando ya esté en ebullición, con extrema precaución para no quemarnos, lo echaremos lentamente por el desagüe afectado. Mucha atención, no lo hagáis de golpe, por el contrario, lo iremos vertiendo poco a poco, y en unos minutos tendremos nuestra tubería desatascada.
Bicarbonato con vinagre
Es un truco altamente económico y muy efectivo, además podemos usarlo con atascos más importantes que en el truco anterior. El vinagre es un ácido, y el bicarbonato sódico, una sal, su reacción química genera agua, acetato de sodio, otra sal, y dióxido de carbono, un gas, que desplazarán los sedimentos por las cañerías.
Debéis verter media taza de bicarbonato sódico, es normal que un poco de esta sustancia se quede acumulado a la entrada del desagüe, no os preocupéis porque terminará bajando. A continuación, vertemos media taza de vinagre y esperamos 20 minutos a que se produzca la reacción.
Posteriormente, prepararemos unos 3 litros de agua hirviendo aproximadamente y, de la misma manera que antes, la iremos echando poco a poco por el desagüe. Podemos ayudarnos con un desatascador de émbolo.
Sosa caustica
Este truco solo lo usaremos cuando nos encontremos ante un atasco de tuberías muy importante. Os recomiendo siempre probar alguno de los anteriores, ya que este producto es muy corrosivo y puede provocar quemaduras. Para aplicarlo necesitaremos gafas protectoras y guantes de goma y, lo más evidente, tener mucho cuidado en la manipulación.
Tenemos que verter una cucharada sopera de sosa caustica en la tubería atascada, y después, un vaso de agua caliente muy poco a poco. Lo dejaremos actuar media hora. Si el atasco continúa después de haber dejado correr agua caliente durante unos minutos por la cañería, volveremos a repetir esta operación.
Pues eso es todo lo que podéis hacer para desatascar vuestras tuberías, fácil ¿verdad? En todo caso, sabéis que siempre os recomiendo prevenir antes que curar, y para ello, aquí van también unos consejos que os ayudarán a no generar atascos en vuestras tuberías:
- Tratad de usar siempre un tapón filtro que evite que los trozos sólidos más grandes de comida se cuelen por las cañerías.
- Limpiad las tuberías periódicamente con agua caliente y sal. Muchos de los productos que usamos como jabones y detergentes, pueden dejar sedimentos y evitaremos que se conviertan en atasco de tuberías si los retiramos de forma continua.
- Jamás tiréis papeles no degradables por el retrete, pueden obstruir la taza e incluso el drenaje completo.
- Evitad arrojar el aceite por las tuberías, además de ser altamente contaminante, hace que los restos sólidos queden pegados a la cañería y aumentan los atascos de tuberías.
Ya sabéis que en Leo Manitas somos expertos fontaneros y estaremos encantados de ayudaros con situaciones de cualquier tipo en este campo. Podéis contactarme en el formulario o en mi página de Facebook.
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¡Hasta pronto, Manitas!
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